Demonizadas y mal usadas, las pantallas ocupan un lugar importante en la vida familiar actual. Conversemos para seguir transitando el camino del aprendizaje de su uso saludable e inteligente.
Por fortuna, la sociedad va entendiendo que nadie es perfecto y que todos somos distintos. Decirlo, de todos modos, no es lo mismo que actuar en consecuencia en casa, en la escuela, en la vida... ¿Vamos a pensarlo juntos?
Pocas cosas enojan, frustran y agotan tanto como las desobediencias repetidas. Nuestro objetivo: que sean oportunidades de enseñar y transmitir lecciones de vida, con el menor estrés posible.